top of page

Marta Platas

Entre otras cosas soy:

 

Creadora e Instructora de Arrebatadas

​

Cinturón negro Kenpo Kai

​

Técnico deportivo nacional - N1

​

Titulada en Coaching e Inteligencia Emocional

​

Monitora de Yoga

​

​

Carta Para ti, que estás leyendo esto

Hola.

​

No sé exactamente quién eres.
No sé por lo que has pasado, si alguna vez has sentido miedo, si alguna vez has dudado de ti, si alguna vez te han hecho sentir pequeña.

Pero si estás aquí, hay algo dentro de ti que busca fuerza.
Y quiero que sepas algo desde ya: no estás sola.

 

Me llamo Marta.
Soy mujer, cinturón negro, productora de eventos internacionales, apasionada de las artes marciales… y también una mujer que ha vivido el abuso, la violencia, el acoso, el miedo y la anorexia.

​

Durante años aprendí a hacerme pequeña. A ocupar menos. A desaparecer sin irme.
Y aunque nadie lo notaba desde fuera, pasé demasiado tiempo en guerra con mi cuerpo. Con lo que comía. Con lo que no comía. Y cuestionando todo el tiempo si me merecía comer.

No sabiendo donde estaban los límites, porque mi NO nunca fue válido.
Tengo 34 años y solo llevo un año y medio sin saltarme una comida.
Un año y medio aprendiendo a habitarme sin culpa.
A quererme sin condiciones. Y sigo aprendiendo al lado de todas las que conmigo caminan.

​

Pero fue a los 19 años cuando me lancé de cabeza al mundo de la defensa personal. No porque soñara con trofeos ni medallas, sino porque necesitaba volver a sentirme dueña de mi cuerpo, de mi espacio.
Aprendí a luchar con cuchillos, con el cuerpo y con la mente.
Y a cada entrenamiento, me iba encontrando un poco más, y la necesidad de autodestrucción se fue apaciguando.

​

Así nació Arrebatadas.
No como un curso más de “patadas y trucos para chicas” —eso que muchos creen que es la defensa personal femenina—  sino como una herramienta real, profunda y transformadora.
Un espacio para mujeres que quieren volver a sí mismas, y no quieren o no pueden hacerlo solas.

​

He pasado más de 12 años trabajando en eventos por todo el mundo, siendo muchas veces la única mujer en equipos formados sólo por hombres.
Y créeme: sé lo que es el paternalismo disfrazado de “te estoy ayudando”,
la condescendencia que convierte tus logros en “casualidades”,
y esa frase tan encantadora de “venga, sonríe”, como si eso resolviera algo.

La sexualización de una mujer en su puesto de trabajo dentro de en un “cenamos esta noche”.

Ser tachada de "borde", "loca" o de estar "siempre a la defensiva" por no callar más y poner límites. 


Y se lo que es construir algo propio, con carácter, con valores, con propósito y con una comunidad que nos sostenga.

Hay cosas que no se ven a simple vista:
Mis años de terapia.
Mi diagnóstico de TDAH, que hace que mi cabeza sea un torbellino de ideas, emociones, impulsos…
y también un radar empático que me permite conectar de verdad con quienes tengo delante.

​

Soy intensa.
Divertida.
Testaruda.

Un poco desastre.
Y sí, también asertiva hasta el tuétano.

Y con todo eso —con todo lo que he sido, con todo lo que he sanado, con todo lo que aún estoy aprendiendo y procesando— creé Arrebatadas.

​

Para ti.
Para nosotras.

Porque esto no va solo de aprender a golpear.
Va de aprender a poner límites, a decir que no, a ocupar nuestro espacio con dignidad, sin miedo, sin vergüenza. 
Y también —aunque cueste— a quedarte dentro de ti, sin querer huir. Ser tu casa, tu hogar y tu lugar seguro.

​

Si algo de esto resuena contigo, si alguna parte de ti siente que es hora de volver a ti misma, de recuperar lo que un día te arrebataron…

​

Bienvenida.

Aquí empieza tu camino de vuelta a ti.

​

Con cariño te espero,

​

Marta
Creadora de Arrebatadas

Nos vemos en Insta o en el tatami

  • Instagram
bottom of page